martes, 17 de agosto de 2021

Atados al azar: La catedral de Justo ...

Atados al azar: La catedral de Justo ...: La fe mueve montañas. Ese dicho popular se hace realidad en la persona de Justo Gallego Martínez. Es necesario escribir su nombre completo...

La catedral de Justo Mejorada del Campo Madrid “Ad Maiorem Gloriam Dei” Por José María Garrido de la Cruz




La fe mueve montañas.

Ese dicho popular se hace realidad en la persona de Justo Gallego Martínez. Es necesario escribir su nombre completo en su obra, en Mejorada del Campo. Veo en su autor a un monje renacentista. ¿Un anacronismo? Puede ser, pero me gustaría tenerlo como ejemplo.

¿Penitencia por su expulsión del Monasterio de Santa María de la Huerta, o acción de gracias por su curación?

Nadie más que él conoce la respuesta.

Una respuesta que comenzó aquel doce de octubre de 1961 cuando decidió empezar a mover montañas para construir desde lo ínfimo, desde los residuos y las ruinas, una obra grandiosa, para mayor gloria de Dios, a pesar de sus detractores.  Y es que a los genios siempre les surgen enemigos, tal vez por la cercana envidia.

   No es curioso, es excepcional, es novedoso y sorprendente, ver un trozo de hierro saliente de una columna, y preguntarle a Ángel, agachado, junto acu una caldereta de cemento, el sucesor de justo, - aún sin apellidos -, ¿Quién corta esto? Y oír su respuesta, desde su cielo de humildad. ¿Quién lo va a cortar? Yo mismo. ¿Y cuantas personas trabajan aquí? Yo solo, con algunas voluntarias. Ya no le pregunto cuando se terminará la obra. Creo que solo   depende de Dios y de la ayuda del pueblo. Si le pregunto por los materiales me enseña su camión y me dice que es él quien sale a buscarlos cuando los necesita.

   Y es que Justo, ese monje ejemplar de la Orden Cisterciense de la Estrecha Observancia, ha encontrado en Ángel ya hace más de veinticinco años, un ángel continuador, que defiende la perpetuidad de su obra. Porque no puede quedar inacabada.

Por eso solo una palabra: gracias.