Aunque no acierte a devolverle la sonrisa como se merece, el hecho de
que una cupletista de la talla de Mari Pepa de Chamberí, esté a tu lado siempre es un honor, y si
además la escuchas emocionarse con su “Salve a la Virgen de la Paloma”, pues puede que se te encoja el alma de
emoción, pero lo que sí es seguro es que te va a resultar difícil olvidar. Porque la oímos cantar y repetimos y
volvemos a buscarla para escucharla otra
vez.
Castiza y poeta busca extraterrestres, luego se va peregrina por el
camino de Santiago. ¿Cómo no vas a seguirla con agua, azucarillos y aguardiente, por la Puerta de Alcalá?
Porque son unas fiestas que no deben
perderse, porque es una voz y un estilo que no debe olvidarse, porque se deben
promocionar y fomentar las actuaciones de artistas auténticos y españoles como
ella, aunque solo sea por la propia
esencia de la fiesta. Por Madrid.
Desde nuestro blog
“atados al azar” agradecemos iniciativas como esta que contribuyen a la
difusión de la cultura, y a los intérpretes, que gracias a ellos podemos
conocerla y disfrutarla.
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