Edelina Santos estaba radiante, frente a su rival desvanecida, en aquella sala del anatómico .
Anabella ahora estaba
donde siempre debería de haber estado.
El veneno había hecho
efecto.
¿Y si no estuviera
muerta?
- Carlos… ¿Qué haces
aquí?
- ¿Y tú?
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