domingo, 17 de mayo de 2020

CUANDO LLEGA LA TARDE, LUIS EDUARDO AUTE Por JOSÉ MARÍA GARRIDO DE LA CRUZ



Hay páginas del calendario que cuando llega la tarde se vuelven oscuras porque alguien se marcha.  Hay letras que caminan despacio hacia el papel porque se resisten a dar una noticia. Hay guitarras que siguen sonando a través de mis ventanas. Es verdad, Luis Eduardo, soy como me  decías un envidioso porque quiero seguir escuchado tu voz, aunque sea en tono grave que me lleve al mundo imaginario de tu arte. Ahora ya nadie moverá tu pluma, dibujará tus animales ni tocará tu guitarra. Antes ya eras un amigo, ahora eres un mito. Te guardaré en mi memoria, como estás en la de otros muchos que no dejarán nunca de escucharte
Tu guitarra y tu voz seguirán sonando, tus dibujos se saldrán seguro de ese animal ario o de ese animal ito que tanto te gustaba. Y seguirás preguntándole al fuego ¿Cómo te llamas? U él te seguirá respondiendo como siempre. Llamas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario