Microrrelatista y poeta maña, hoy nos muestra esta otra vertiente de su sensibilidad y de su saber escribir.
MONTES DE CENIZA Y JARA
Galardonado con
el PRIMER PREMIO EN EL X
CERTAMENINTERNACIONAL DE POESIA SACRA LEAL 2017
MARIA BELEN MATEOS GALAN
Polvo que despierta luz
en la piedra distraída y arrellanada
de la montaña.
Regazo en la falda efímera
que nos llama, a su vientre de madre,
en un reclamo de tempestad y presencia.
Lengua que alivia el paso del camino
con sus ángulos azabache y ceniza.
en la piedra distraída y arrellanada
de la montaña.
Regazo en la falda efímera
que nos llama, a su vientre de madre,
en un reclamo de tempestad y presencia.
Lengua que alivia el paso del camino
con sus ángulos azabache y ceniza.
Somos abismo, centro de gravedad,
horizonte marcado por alas doradas,
vuelo agitado en la calma de la brisa.
Somos signo en la palabra de un río,
en la corriente impasible de una tormenta.
Somos amenaza en una caída al vacío,
vértigo vencido en el suave perfume de la tierra.
horizonte marcado por alas doradas,
vuelo agitado en la calma de la brisa.
Somos signo en la palabra de un río,
en la corriente impasible de una tormenta.
Somos amenaza en una caída al vacío,
vértigo vencido en el suave perfume de la tierra.
El tiempo alivia la marcha de los que yacen
en el relieve de sus aguas,
en los que erosionan la colina anhelada
con la caricia a ese refugio inquieto de fatiga.
en el relieve de sus aguas,
en los que erosionan la colina anhelada
con la caricia a ese refugio inquieto de fatiga.
Escamas que sellan las plumas de la tierra,
fiebre que devora la cima húmeda de conquista,
pliegue ondulado en la latitud arbolada de la esfera de la vida.
fiebre que devora la cima húmeda de conquista,
pliegue ondulado en la latitud arbolada de la esfera de la vida.
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